El furor por el eclipse solar de la semana pasada le dio un fuerte impulso a esta actividad, que mueve millones en el mundo y que generó que provincias y ciudades argentinas han comenzado a promocionar. Por ejemplo, en San Juan se empezó a desarrollar un plan para transformarse en la «capital del turismo astronómico» de Argentina y en el caso de la Patagonia esperan ansiosos el próximo eclipse solar total, el 14 de diciembre del 2020, y así marcar una diferencia en lo económico con los miles de turistas y aficionados que llegarán para el acontecimiento ya nombrado.
Alentados por la llegadas de los cazadores de eclipses, San Juan puso en marcha un plan para generar ingresos con el turismo astronómico. «Recibimos 37.000 turistas que generaron ingresos promedios por 380 millones de pesos durante la semana del eclipse solar», dijo el secretario de Turismo en San Juan, Roberto Juárez. La provincia promueve una ley para convertirse en la capital nacional de turismo astronómico, que ya consiguió media sanción en Diputados y aguarda su sanción definitiva en el Senado.
Unas de las visitas principales dentro del Parque Nacional El Leoncito es disfrutar y contemplar el cielo. El Leoncito en San Juan, que con 76.000 hectáreas de áreas de reservas, alberga el complejo Astronómico El Leoncito y el Observatorio Astronómico Dr. Carlos Cesco. Juárez además destaca que el gobierno de Sergio Uñac está construyendo un centro de interpretación astronómica en el Observatorio Félix Aguilar de la Universidad Nacional de San Juan, en la capital provincial. «Ya está lista la obra y estamos armando los contenidos», explicó el subsecretario.
Ricardo Podestá es el director del Observatorio Félix Aguilar; está convencido de que el astroturismo crecerá exponencialmente en Argentina. «Las actividades para los turistas las tenemos bastantes aceitadas, en Calingasta en la estación Cesco. Ahora en la sede central en la capital, en Chimbas, vamos a recibir mucha gente. Somos los primeros del país y esperamos avanzar a Chile, donde esta más desarrollada esta actividad», expresó el astrónomo sanjuanino.
«La satisfacción intelectual y espiritual que genera esta actividad se ha convertido en algo necesario en una sociedad donde el estrés y la falta de tiempo se imponen como estilo de vida», comenta Mariana Juri, secretaria de Turismo de la ciudad de Mendoza, que impulsa el turismo astronómico. Hace cinco años comenzó a realizarse el programa de astroturismo para promover la ciencia, el cuidado ambiental y ampliar la oferta turística. Todos los meses se realizan salidas hacías distintos puntos de la capital mendocina como el Parque Central, Barrio Cívico, Reserva Natural Divisadero Largo, Nave Cultural y Parque O´Higgins.
¿Cómo es el perfil del astroturista? La operadora turística en San Juan Silvia Yafar (Money Tour) fue la responsable de coordinar el viaje a la Argentina de 600 extranjeros para presenciar el eclipse total del sol el pasado 2 de julio. «Viajan e invierten mucho dinero en contemplar estrellas, del mismo modo que otros turistas eligen las playas o otras ciudades», los describe. Sus clientes son de todas partes del mundo y llegaron al país altamente equipados para este acontecimiento. Silvia también cree que el eclipse fue una bisagra para iniciar una nueva etapa de desarrollo del astroturismo. «Tenemos los cielos diáfanos, ahora dependerá de nosotros que este negocio crezca», dice la agente de viajes.
Otros destinos de interés mundial para hacer astroturismo son las Salinas del Gualicho, Río Negro; Malargüe, Mendoza; El Salar de Uyuni, Bolivia; el Parque Nacional de Teide, en Tenerife y el desierto de Atacama, en Chile, donde es posible ver alrededor de 6500 estrellas.
Nicolás Alvarez