Distribuida estratégicamente en varios puntos de la ciudad, Bienalsur activó su calendario de actividades en la estación Buenos Aires.
El que se roba todos los flashes en esta edición es el italiano Michelangelo Pistoletto. Al menos tres obras suyas, incluyendo la famosa Venus de los trapos, se podrán ver en cada stop de su ruta, que incluye el Museo Nacional de Bellas Artes, el Hotel de los Inmigrantes, y el Museo de Arte Decorativo, entre otros espacios.
Otra muestra imperdible es Flor de sal, del japonés Makoto Azuma, quien realiza esculturas con ikebana, bonsái y flores. Bajo el tilo, de Rita Fischer, presenta una propuesta diferente, con una instalación creada especialmente para este evento, y que se compone de elementos recolectados en los alrededores del Ecoparque.
En clave feminista, Puede que esta vez sea diferente invita a los asistentes a adentrarse en una biblioteca en castellano sobre arte y empoderamiento femenino. Yendo hacia lo pictórico, Marcelo Masagao interviene sobre acuarelas realizadas por Jean-Baptiste Debret en 1830 y nos entrega Homens Brancos.
Si querés aprovechar la Bienalsur, no podés dejar de acercarte a ver estas muestras.