Glenn Greenwald, el periodista norteamericano, fue noticia por el reportaje hecho en el diario The Intercept Brasil, en el cual se difundieron los mensajes de textos que intercambian el ex juez Sergio Moro –actualmente ministro de Justicia- y el fiscal Deltan Dallagnol, durante la investigación del Lava Jato. Los chats sacan a la luz, -según Intercept- cómo Sergio Moro habría conspirado en secreto con los fiscales para construir el caso penal que llevó a la cárcel a Luiz Inácio Lula Da Silva. Además habrían tenido como finalidad que Fernando Hadad del Partido de los Trabajadores (PT) no ganara las elecciones de 2018.
Ante tales revelaciones, desde el ambiente de la política y el periodismo se ofrecieron numerosas muestras de apoyo al periodista. Es el caso de Guillerme Boulos -coordinador del Movimiento de los Trabajadores sin Techo (MTST): «Los mensajes reveladores son devastadores. El CNJ (Consejo Nacional de Justicia) debe actuar inmediatamente. La Lava Jato es una organización criminal”. También la diputada federal del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), Samia Bomfim, en Twitter expresó: “Están saliendo mensajes que revelan la conducta ilegal y anti ética de Moro y Dallagnol. Brasil tiene el derecho de conocer el contenido de esos diálogos. Todo nuestro apoyo a Intercept, al periodista Greenwald”. Por el lado de la prensa, Caros Brasileiros escribió en DW Brasil: «Al exponer las conversaciones de Moro, Greenwald, simplemente investigó una pauta de extrema relevancia política. Y está siendo atacado por eso».