Luego de un gran semestre, Las Leonas lograron quedar dentro de las 4 mejores de la Pro League. El equipo dirigido por Carlos Retegui se encuentra en la segunda posición del torneo con 35 puntos y una efectividad del 83,33 por ciento. Incluso perdiendo los dos partidos que tienen pendiente en el viejo continente, frente a Holanda este jueves 20 de junio y a Bélgica el 23 del mismo mes, el seleccionado tiene la clasificación asegurada a la gran final del torneo en Amstelvenn. La gran apuesta del entrenador fue volver a convocar jugadores de la vieja guardia y los frutos se reflejan en los resultados.
A principio de año, el «Chapa» Retegui decidió que era hora de regresar por un nuevo ciclo de gloria en la selección femenina, después de que su par Agustín Corradini fuera removido del puesto por falta de resultados. El entrenador, quien es conocido por llevar a Las Leonas y a los Leones a lo más alto del hockey mundial, tuvo un gran acierto, convenció a varias jugadoras históricas de volver al equipo, entre ellas Rosario Luchetti y Silvina D’Elía y Carla Rebecchi (esta última ya había empezado a entrenarse a fin de año).
La temporada pasada, a pesar de contar con buenas individualidades, la selección sufrió muchísimo la poca experiencia del grupo. Dentro del campo de juego y fuera del mismo era necesaria la intervención de más jugadoras de jerarquía. El mundial de Londres 2018 fue bastante flojo ya que el equipo perdió por shoot outs en cuartos de final, después de igualar 0 a 0 con Australia. Esta fue la primera vez desde 1998 qué Las Leonas no llegaron ni siquiera al podio.
Luchetti, D’Elía y Rebecchi, quienes formaron parte de los principales éxitos del plantel anterior, volvieron para aportar su experiencia al seleccionado. Las múltiples vivencias de cada una fueron y serán de gran ayuda para afrontar los distintos desafíos que se vienen por delante. Hay que destacar que el tridente histórico se encuentra en óptimas condiciones y en un muy buen estado físico para hacerle frente a la seguidilla de partidos. En relación a esto, en una entrevista con el diario La Nación, la defensora mendocina comentó: «Yo trato siempre de transmitir lo que en su momento me trasladaron las más grandes, con experiencias y anécdotas. También me gusta escuchar a las más jóvenes para ver cómo se sienten. Eso está bueno porque nutre al grupo».
La volante del equipo, «Charo» Luchetti, comenzó con tan sólo seis años a interiorizarse en este deporte. Recién en el 2005 debutó en la selección, pero a medida que los años pasaron, ella se volvió cada vez más relevante. La Leona fue partícipe de muchos logros a nivel mundial, entre los más importantes se encuentran la medalla de Oro en los Champions Trophy de 2008, 2009 y 2010, el Bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, la de Plata en Londres 2012 y el Campeonato Mundial de Rosario 2010.
A fines del 2014, Luchetti le dijo adiós al seleccionado al no sentirse cómoda con la forma de actuar de la Comisión Directiva de la Confederación Argentina de Hockey, en ese momento al mando de Aníbal Fernández. Después de su renuncia muchas de sus compañeras decidieron que también era hora de hacerse a un lado, entre ellas estaban D’Elía y Rebecchi, quien después de un corto plazo retornó.
«Piti» D’Elía hizo su debut con la camiseta de Argentina en el Sudamericano de Santiago de Chile en 2003, y al igual que su compañera tuvo una destacada carrera en la albiceleste y consiguió una amplia cantidad de títulos. Luego de su renuncia en 2015, la jugadora tuvo un fugaz retorno durante el período de Corradini como entrenador (2017), que sólo duró dos semanas, un par de entrenamientos y ni siquiera un partido oficial. Actualmente es una de las jugadoras más importantes de la defensa argentina, ya que demuestra partido tras partido que su calidad sigue intacta y que todavía tiene mucho para darle a esta selección.
El caso de Carla Rebecchi es distinto, ya que su abandono temporal estuvo relacionado a sus grandes deseos de formar una familia y ser madre. Un tiempo después del nacimiento de su hija Vera, la delantera volvió a entrenarse y actualmente sigue mostrando la garra y potencia que tanto la caracteriza.
En una entrevista con la CAH, la jugadora hizo referencia su nuevo rol en el equipo. «Después de tantos años aprendí un montón, mismo estando afuera. Creo que un año y medio te hace ver las cosas distintas. Lo único que quiero es sumar para que el equipo siga creciendo, dar todo lo mejor, poder seguir inculcando, demostrando con el ejemplo, todos los valores que a mí me fueron enseñando y que me parece que son clave para un equipo», explicó.
Rebecchi tenía 20 años cuando Sergio Vigil la convocó para jugar su primer torneo con el equipo nacional; vistiendo esta camiseta logró quedar en la memoria de muchos de los amantes del hockey. En total participó de 10 Champions Trophy , 3 Juegos Olímpicos y 3 mundiales.
Lo único que les queda por ganar a estas tres mujeres dentro del seleccionado es la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y esa es una de sus metas más claras. En conversación con La Nación, D’Elía expresó: «La idea es sumar a partir de la experiencia y, obviamente, la medalla dorada está todo el tiempo en mi cabeza: en cada pasada, en cada sesión en el gimnasio y en cada día de entrenamiento». Su compañera de equipo también mencionó su anhelo por triunfar . «Es que para mí, la medalla dorada «es» una obsesión. Si no, no estaría acá. Todos los días me veo con la medalla dorada colgada y llorando. Lloré en el Mundial de Rosario 2010, pero este llanto en los Juegos Olímpicos sería todo: una medalla ganada, el fin de mi carrera y todos los recuerdos del hockey juntos», reflexionó Luchetti.
El amor por la camiseta argentina, parece ser más importante que cualquier otro desacuerdo, es por esto que las tres decidieron dar revancha e ir en busca de la gloria.
Pilar Misenti Nolazco, 2A turno tarde