Día a día, las redes sociales pasaron a ser un factor cada vez más influyente dentro de la política no solo en la Argentina, sino en todo el mundo. Son millones las personas que se informan a través de aplicaciones como Facebook, Twitter e Instagram en vez que por el método tradicional de los medios de comunicación como el diario, la televisión o la radio, y que los propios políticos ya utilizan como forma de comunicar e interactuar con sus seguidores.
Santiago Mazzuchini, licenciado en Comunicación de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y que ha trabajado en asesoría de comunicación digital, contribuye a explicar este fenómeno: “En el caso de la política, la interacción es importante, pero tan importante como la interacción misma, es que ésta sea mostrada. Los timbreos del gobierno nacional fueron exitosos no por la interacción misma, sino por el hecho de que fueron mostrados a través de fotografías que intentaron construir la idea de que se trata de un gobierno que está cerca de la gente”.
“Luego, también hay que pensar en los tipos de redes. En Twitter suele ser más común la interacción a través de la palabra, pero en Instagram y Facebook se utiliza bastante (y en esto también el gobierno fue pionero) la transmisión en vivo, donde las ciudadanas y ciudadanos pueden preguntar directamente a sus representantes. Ahora bien, esa interacción tiene un límite. Por ejemplo, es sabido que plataformas como Twitter son un territorio propicio para la discusión. Bueno, en general los candidatos y candidatas de gran peso no entran en ese juego, sino que utilizan cuentas de trolls, bots o bien referentes de segunda o tercera línea para confrontar”, asegura.
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¿Qué políticos tienen más seguidores en las redes y porque es tan importante esto?
En Twitter, Cristina Fernandez de Kirchner es quien cuenta con más seguidores, con un número de 5.440.000, seguido de Mauricio Macri con 4.830.000 y completando el podio María Eugenia Vidal con 1.460.000.
Facebook la red social en la que se nota más la diferencia entre un político y otro, ya que el actual presidente es quien lidera con 4.488.000 «me gustas»en su página oficial, mientras que la ex presidenta de la Nación cuenta con 2.400.000 y la sigue la actual gobernadora de la provincia de Buenos Aires con 1.600.000.
Por último, en Instagram, Macri tiene 961.000 seguidores; segunda se ubica Cristina, con 709.000; y tercera Vidal, con 567.000.
Mazzuchini sostiene que sin redes sociales, hoy es imposible posicionar a un candidato: “Hoy se vuelve fundamental, tanto para campañas políticas como para la venta de servicios y productos, tener una presencia en el ámbito digital. Qué herramientas y plataformas utilizar dependerá de lo que se quiera comunicar y el modo en que se quiera hacerlo. Sin embargo, tanto Facebook como Instagram se han vuelto inevitables, ya que es imposible pensar una estrategia digital sin estar en ambas plataformas. Por supuesto, no es suficiente con tener presencia en redes. Hay que seguir considerando la importancia de los medios de comunicación tradicionales. Una buena planificación de campaña tiene que ser transmedia, es decir, transversal a todo el sistema de medios disponibles (radio, televisión, prensa gráfica, plataformas digitales). En un mundo convergente se necesitan estrategias convergentes”.
Un ejemplo de esto fue cuando Cristina Kirchner anunciara el pasado 18 de mayo su fórmula presidencial como vicepresidenta de Alberto Fernández, tras publicar un vídeo de 13 minutos tanto en Facebook, Instagram, como en Twitter. Un dato para resaltar de este movimiento por parte de Unidad Ciudadana es que, tras 48 horas del anuncio, el precandidato a presidente gano 88.000 seguidores y la ex presidente 20.000, en la sumatoria de las tres plataformas.
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