El Ministerio de Seguridad, al autorizar el uso de las pistolas Taser, generó en parte de la sociedad un cuestionamiento y oposición a esta nueva adquisición. Son muchas las preguntas que se realizan algunos con respecto a su uso, ya que al funcionar las mismas con descargas eléctricas, se generan dudas y se abre un cuestionamiento sobre las personas que sufren alguna patología cardíaca o si se podría hacer abuso de su portación.
Lo cierto es que en principio, el Gobierno compró 300 armas Taser y sólo podrán ser utilizadas por las Fuerzas Federales en estaciones de trenes y aeropuertos. No harán uso de estas armas las policías locales, como por ejemplo la Policía de la Ciudad en la vía pública.
Con respecto a la utilización de estas armas eléctricas, la Fundación Cardiológica Argentina emitió un comunicado en el que desestimó que el uso de las pistolas Taser pueda producir la muerte «por alteraciones eléctricas en el corazón». Y dice: «Lo que la pistola genera es una incapacitación electromuscular temporal, que impide que la persona pueda escapar o agredir», indica el comunicado y subraya: «No existe evidencia científica que registre muertes por fibrilación ventricular. Los decesos descriptos se generan por otras patologías clínico neurológicas asociadas al estado de excitación de la persona que corre mientras huye o al uso de drogas».
Sólo podrán hacer uso de las pistolas Taser el personal policial capacitado y que haya realizado el curso de su portación. La cantidad es escasa y es por este motivo que sólo se utilizará en determinados sectores de riesgo. Uno de los Instructores de Tiro en armas eléctricas para las Fuerzas Federales, Diego Ángeles, argumentó que estas armas tienen la característica de anular momentáneamente a la persona que quiera cometer el ilícito para su correcta reducción y aprehensión. “Es un uso policial intermedio, sólo se realizará en caso de que se hayan agotado todas las instancias de mediación verbal y física o que el personal policial se encuentre en desventaja numérica, según indica el uso racional de la fuerza aclarando paso a paso el accionar policial acorde a la amenaza recibida, llegando así como última instancia, al uso de arma de fuego”, aclara el instructor.
En cuanto a información técnica, Este tipo de pistolas permite realizar descargas eléctricas hasta un máximo de 50 mil voltios y sus dardos -que tienen una velocidad de 175 km/h- pueden alcanzar a un sospechoso hasta casi 11 metros de distancia. Por lo que Ángeles dice: «Al trabajar con una potencia eléctrica baja, no habría inconveniente, por ejemplo, si el delincuente tiene un marcapaso. Se ha probado en muchísimos países y no hubo complicaciones físicas a largo plazo. Sus efectos son contracción de músculos, parálisis de piernas y brazos, aturdimiento, vértigo y hormigueo”. Otro dato muy importante es que poseen un chip que registra la fecha, el horario y el lugar exacto. «El policía después tendrá que justificar por qué la usó», recalcó.
Quien tampoco quiso quedar afuera de la polémic, fue la propia Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al aclarar mediante un tuit que publicó el 7 de mayo último: “Las armas electrónicas no letales de tipo “Taser” se incorporan en el cuidado de la ciudadanía. Hoy se dictó el reglamento de uso en el Boletín Oficial. ¡Un paso más contra la delincuencia!”.
Nicolás Mazzola