En el fútbol siempre hubo y habrá “matrimonios” entre clubes y jugadores. Italia siempre ha abierto sus puertas a jugadores argentinos, y estos han devuelto con creces esa confianza puesta en ellos. Por eso resuenan casos como los de Batistuta, Zanetti, Higuaín o Crespo, quienes por sus destacadas actuaciones, catapultaron a sus respectivos clubes a la gloria. Por supuesto que hay muchos otros casos. Un ejemplo en la actualidad es el de Alejandro “Papu” Gómez y Atalanta.
Surgido en Arsenal de Sarandí (donde obtuvo la Copa Sudamericana y la Suruga Bank), pasó por San Lorenzo antes de emigrar al viejo continente, más precisamente al Catania, club con el que disputaría 3 temporadas. El Metalist ucraniano se interesó en contar con el argentino para la temporada 2013/14, pero debido al clima hostil que había entre Ucrania y Rusia, se vio obligado a marcharse y volver a Italia, más precisamente al humilde Atalanta.
El modesto equipo de la ciudad de Bérgamo, estaba muy lejos de ser lo que es hoy. Luchaba por mantener la categoría y no tenía grandes aspiraciones. Pero un interesante proyecto asomaba en el horizonte y el Papu iba a ser la piedra angular sobre el cual se sostendría. En sus primeras 2 temporadas, pudo establecer al equipo en la Serie A, y a partir de la tercera, se vería tanto su mejor versión como la del club, ya que lograron clasificar a una copa internacional (Europa League) tras 28 años, finalizando en el cuarto puesto. Este fue el mejor año del argentino en cuanto a goles (16), ya que en ninguna otra ocasión convirtió tal cantidad. Más allá de esta estadística, la importancia de su figura, radica en cómo hace jugar al equipo. Su movilidad, visón y su gran capacidad de asistir a sus compañeros, hicieron que poco a poco se fuese ganando el cariño del público bergamasco. También hay que destacar su actividad en redes sociales con la popularización global del famoso “Papu Dance”, con el cual celebra cada uno de sus goles.
Pese ser un equipo pequeño, el Atalanta hoy en día se ha establecido entre los clubes más fuertes de Italia. Capaz de hacerle frente a cualquiera de los grandes del país, inclusive eliminándolos de la Copa Italia, como lo hizo la presente campaña con la Juventus. Una fuerte inversión en materia de juveniles (las divisiones inferiores del club son consideradas una de las más importantes de todo Italia, por la cantidad y jugadores que produce) y compras estratégicas para reforzar al equipo, son la base de este proyecto. Incapaces económicamente de traer grandes figuras, optan por potenciar a los juveniles con jugadores de experiencia, lo que hace que lo que más resalte es el funcionamiento en conjunto. Ahí es donde aparece la figura del mediapunta argentino.
Aquel histórico cuarto puesto es el que ocupa hoy en día en la Serie A, a 3 fechas del final. Esto le permitiría clasificar a la próxima Champions League, pero la lucha es muy intensa, debido a que hay 6 equipos en 7 puntos de diferencia. Igualmente, la temporada de Atalanta tomó importancia porque tiene la posibilidad de conseguir un título. Accedió a la final de la Copa Italia tras vencer a la Fiorentina por 2 a 1, con un gol del argentino. Hay que destacar que el único título que logró el club en su historia fue, precisamente, la Copa Italia en 1963. De darse estos resultados, nadie podrá divorciar al Papu del Atalanta.
Matías Dominguez 2°A Turno Mañana.