El básquetbol estadounidense perdió a otro de sus símbolos luego del fallecimento del legendario ex escolta de los Boston Celtics, John Havilcek, en la localidad de Júpiter, en el estado de Florida. Tenía 79 años y atravesaba una larga lucha contra el mal de Parkinson. Además, tres semanas atrás, había sufrido una fuerte neumonía por la cual fue internado de urgencia.
Conocido como “Hondo”, apodo surgido por el protagonista principal de una película con ese mismo nombre, Havilcek fue figura y emblema de los Boston Celtics, equipo al cual llegó en 1962 tras ser elegido en el puesto número 7 del “draft” de aquel año (mismo año en el cual fue elegido en la séptima ronda del “draft” de la NFL). En la franquicia de Massachusetts, el escolta compitió en 16 temporadas, ganando un total de 8 títulos de la NBA, siendo así el tercer jugador más ganador de la historia, únicamente por detrás de Bill Russel con 11 y Sam Jones con 10.
Entre otras distinciones individuales, Havilcek fue seleccionado 13 veces para el “All Star Game”, 11 apariciones en el Mejor Quinteto de la NBA, 8 en los mejores quintetos defensivos y fue elegido como el Jugador más Valioso (MVP) de las finales de 1974, además de formar parte del Salón de la Fama de la NBA desde el año 1984. Durante su paso por los Celtics, el escolta promedió un total de 20.8 puntos (26.935 puntos en total, decimosexto anotador histórico de la liga), 6.3 rebotes, 4.8 asistencias y 1.2 robos. Además, vistió la camiseta blanca y verde en 1.270 partidos, siendo el jugador con más presencias en la franquicia y estando entre los 10 primeros en la historia de la liga. Luego de retirarse en 1978 su dorsal, el número 17, fue quitado de la plantilla.
Paul Silas, ex compañero de Havilcek en los Celtics, declaró en una entrevista a la cadena ESPN: “Amaba a ese hombre, gané dos títulos con él. Cuando llegué por primera vez a Boston, hablábamos todo el tiempo. Todo lo que quería que hiciera era que lanzara, y cuando no lo hacía, iba directo hacia él. Realmente ha sido uno de los mejores tiradores que he visto. Cuando necesitábamos una canasta importante, él era el que siempre asumía la responsabilidad” .
Autor: Alejo Lignac; 2° A Turno Tarde