Bolívar dio vuelta un partido que parecía perdido ante Obras de San Juan, remontó dos sets y se consagró por octava vez en la Liga Argentina masculina de voleibol. El 3 a 2 final fue con parciales de 20-25, 19-25, 25-23, 25-13 y 18-16.
La serie final entre los sanjuaninos y el equipo bonaerense venía igualada con dos victorias para cada lado en cuatro partidos jugados. Y en el estadio República de Venezuela se jugó el quinto y definitivo punto de la final para definir al campeón.
El equipo sanjuanino arrancó mucho mejor y se llevó el primer set por 25 a 20 demostrando mucha seguridad de principio a fin. El segundo set resultó mucho más parejo, pero nuevamente el equipo visitante mostró sus garras en el final para sobreponerse por 25 a 19.
El equipo obrero, que el sábado había ganado en el Aldo Cantoni de San Juan forzando un quinto partido, parecía que finalmente se quedaba con el título, por la buena diferencia que sacó en sets y principalmente por el juego mostrado, pero esa no era la idea de Bolívar.
El equipo dirigido por Javier Weber se despertó en el tercer set y se impuso por 25 a 23, con más corazón que buen juego. En un cuarto set en el que Las Águilas arrollaron completamente al equipo sanjuanino, igualaron el partido final con un parcial de 25-13 y forzaron un tie-break. Las tribunas del estadio estuvieron repletas y quienes en algún momento se habían apagado por la amplia superioridad del conjunto visitante en los primeros sets, se volvieron a convertir en una verdadera fiesta, con la ilusión de un nuevo título para el club.
En el último set, la definición fue palo y palo. Ambos equipos pelearon palmo a palmo en una definición muy ajustada, donde el partido estaba para cualquiera. Después de arrancar abajo, Bolívar lo dio vuelta, y después de desperdiciar dos match ball finalmente logró consumar la hazaña y se impuso por 18-16, consiguiendo el octavo campeonato, lo que lo convierte en el máximo campeón de la historia argentina.
Valentín Cotter 2°A Turno Tarde