La selección argentina de fútbol perdió 3 finales seguidas. La primera fue en el Mundial de Fútbol 2014 en Brasil, la segunda en la Copa América 2015 en Chile, mientras que la ultima fue en la Copa América Centenario disputada en Estados Unidos 2016. Luego de esto, la mayoría de los periodistas como de los aficionados argentinos criticaron a los jugadores y los catalogaron de «mediocres» o «fracasados». Esto afecto a los jugadores psíquicamente por lo que comenzó a surgir la palabra psicología, uno de los que comento esto fue Di María, delantero que juega actualmente en el PSG. «Estuve a punto de ir al psicólogo, pero al final decidí no hacerlo porque es un tema que tengo que resolverlo solo. Si pierdo una final más creo que no vuelvo, pero hoy sólo pienso en positivo. El sabor amargo todavía dura, pero así son las cosas», declaró para los medios. Por lo que se entiende que a la selección le vendría bien la ayuda de un psicólogo.
Liliana Grabín, directora del Postgrado de Psicología Aplicada al Deporte de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, habló con el famoso portal de noticias web Infobae, y le preguntaron porque un sistema de élite como el de Argentina con un gran cuerpo medico, grandes jugadores y un gran staff de entrenadores, a lo que ella respondió que «En 1978 tuvimos el primer psicólogo en Brasil, Riveira Da Silva, así que la cuestión está en decir por qué no». Otra cosa que le dijeron es sobre el aspecto supuestamente invasivo que existe sobre el profesional en el trabajo del entrenador, a lo que ella respondió que no es necesario que se trabaje directamente con la Selección ya que hay gente como Joan Riera, del FC Barcelona, que plantea al «agente directo de cambio», que es cuando el entrenador les dice que vayan a hablar con el profesional directamente, y «agente indirecto de cambio», que es cuando el psicólogo asesora al entrenador.}
Ya planteado el tema se aclararon la mayoría de las dudas, menos una, ¿Qué pasaría con la selección en las próximas competencias que se le acercan con la ayuda de un psicólogo?
Ignacio Ramírez, 2A TM