La marcha del jueves 30 de agosto plantea un punto de inflexión en las determinaciones que se deberán llevar a cabo para solucionar un problema realmente importante.
Estos inconvenientes se deben principalmente a la falta de acuerdo en un tema sumamente relevante: las paritarias.
Con más de un mes de paro en el sector universitario, la situación es apremiante y su resolución es imperiosa. A estas cuestiones se agrega el hecho de que el punto de encuentro se vislumbra distante en cuanto a las propuestas presentadas por los sectores que representan a las dos posiciones centrales, el gobierno y los gremios. La diferencia salarial oscila entre el 15% y el 20%.
Aunque las mediaciones no fueron eficaces ambas partes tendrán otra reunión en pocos días. Se estipuló el 4 de septiembre como momento para la reanudación de las sesiones y además del tema anteriormente nombrado se vislumbran algunos que surgieron en relación con las políticas económicas y sus consecuencias: el incremento en los precios sobre los servicios (agua, luz, gas) y la inflación, factor que modifica el eje de la conversación en cuanto al porcentaje a mediar.
El Ministro de Educación Alejandro Finocchiaro anunció en un comunicado reciente que el sentido de las conversaciones por las paritarias cambió ya que el piso de la oferta partirá desde el 15% y este índice dejara de ser el techo como se había planteado anteriormente.
Si se encuentra un punto medio entre los planteos de ambos bandos seguramente se llegara a una definición en poco tiempo. Por el momento el día definido para seguir llevando estas conversaciones a cabo es el 4 de septiembre.
Una producción especial de: Francisco Romero, Chafi Siman y Robertino Imberti