Se cumplieron recientemente tres semanas continuas en las que gran parte de las universidades del territorio nacional están de paro, mediante el cual demuestran su malestar con respecto a las constantes negativas por parte del Estado para dialogar sobre las paritarias universitarias. Desde la cúpula de los centros universitarios sostienen que con los recursos actuales, no pueden asegurar el correcto funcionamiento hasta fin de año, a ello se suma el pedido de los decentes por el aumento salarial. Estos dos conceptos fueron respaldados por los gremios FEDUBA y CONADU, y debido a esto veinte universidades se declararon en estado de emergencia.
Los docentes plantearon algo concreto, un 30% de aumento y una clausula gatillo en caso que el alza de los precios lo supere, pero la respuesta por lado del Estado Nacional no hizo más que agudizar las crisis estudiantil, debido a que su contrapropuesta fue un 15% y a pagarse en varias cuotas. Desde el pasado lunes 6 de agosto que ninguno de los bandos en esta negociación soltó un poco de cuerda para que los más de 40.000 alumnos puedan retomar las clases, teniendo en cuenta que luego de las vacaciones de invierno comienza el segundo cuatrimestre, que mucho de los afectados no han podido retomar. Otro de los pilares que sostiene los sindicatos es que desde el gobierno mismo, han sostenido en los últimos meses que la inflación rondara entre el 27 y 32%; mientras que dirigentes de CONADU Histórica informaron que hasta el momento Nación les entregó un 5% en mayo, un 5,8% en agosto y suponen que un 4,2% para el mes entrante. Hasta el momento en estos tres meses mencionados hubo un aumento del 15%, pero González titular del sindicato mantiene la postura que necesitan otro 15% más para poder combatir a la inflación. El viernes 24 de agosto incontables docentes tuvieron la iniciativa de movilizarse hacia Plaza de Mayo con el objetivo de realizar “clases públicas” para aquellos alumnos que puedan y quieran acercarse, la movilización comenzó cerca del mediodía y terminó entrada la tarde – noche; durante la misma semana no solo hubo marchas en Capital Federal sino también a lo largo y ancho del país, Córdoba mostró una gran concurrencia de personas que partieron desde la Ciudad Universitaria hasta el boulevard San Juan e Hipólito Yrigoyen, con un grito en común, «la universidad está en peligro».
No es el primer conflicto que el gobierno encabezado por Mauricio Macri tiene con los docentes universitarios, a principio de año tuvo reiteradas marchas en contra de UniCABA, proyecto por el cual se pretende unificar gran parte de los profesorados y con ello la creación de una solo institución que tenga un solo rector. De cara a la próxima semana, el lunes los gremios fueron convocados al palacio Sarmiento, para una reunión que encabezará el Ministro de Educación Alejandro Finocchiaro, Danya Tavela Secretaria de Políticas Universitarias y los dirigentes de los principales sindicatos, CONADU y CONADU Histórica. Sin todavía conocer como saldrá la negociación se confirmó 4 días más de paro, que finalizará el jueves 30 de agosto cuando miles de personas realicen la “Marcha Nacional Universitaria”, que se dirigirá desde el Congreso de la Nación hacia el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, lo mismo se emulará en las distintas ciudades del país con su respectivo Ministerio.
Gremios de otras áreas se han solidarizado con los docentes en esta lucha por mejorar la educación nacional, pero el mayor apoyo se pudo observar desde las redes sociales, gran parte de la sociedad tomó una postura en favor de que haya un mayor interés por parte del Estado Nacional para que no se abandonen a los centros estudiantiles, porque son estos los que formaron, forman y seguirán formando al pueblo argentino. En las distintas redes sociales se pueden ver posteados miles de comentarios positivos para que las universidades no sean perjudicadas, lo cual es algo particular porque siempre es el pueblo el que levanta la voz ante un paro por parte de los maestros, docentes o personal educativo, ya según éste perjudican al futuro, pero en esta ocasión, el pueblo se ha unido con un mensaje claro, cuidar las universidades nacionales.
Pablo Gilmore