Osvaldo Norberto Carrizo, uno de los miles de maratonistas que participaron del evento, falleció el domingo producto de un paro cardiorrespiratorio. El santafesino de 55 años se encontraba en el cuarto kilómetro del trayecto cuando sufrió la muerte súbita. Además, otro corredor fue trasladado al Hospital Pirovano a causa de un tapón arterial. Luego fue operado en el Hospital Fernández.
Si bien el circuito del medio maratón es largo, poco tardó Osvaldo en ser atendido por un cardiólogo para rápidamente marchar en ambulancia hacia el Hospital Fernández, sitio donde llegó en menos de diez minutos. A pesar de haber intentado salvarlo por casi una hora, los médicos no pudieron recuperarlo.
Más de 20 mil corredores participaron del media maratón más multitudinario del continente y a cada uno de ellos se les requirió previamente presentar un apto médico que confirmara estar en un estado físico correcto para participar del evento.
Así, la probabilidad de que un corredor con resultados positivos en su chequeo médico sufra de un problema físico a lo largo de su recorrido por las calles de Buenos Aires es reducida, pero nunca nula.
Es por eso que el evento contó con siete puestos de la Cruz Roja, con médicos, enfermeros, ambulancias, y la nueva inclusión de 37 desfibriladores, que hicieron de ésta carrera la primera en ser cardioprotegida en Argentina.
Por Juan Ignacio de la Vega, 2°»A» Turno Mañana
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