Cuando los niños, niñas o adolescentes no logran completar sus necesidades básicas materiales o afectivas con sus familias, la adopción pasa a tener un rol determinante. Al ser una institución jurídica su objetivo es proteger los derechos de los menores, garantizar la vida y el desarrollo social de los mismos.
La información difundida por el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (RUAGA) detalla que en el país hay 5.465 legajos vigentes de personas o parejas que desean adoptar. Del total, 90% prefiere adoptar un niño recién nacido, de pocos meses o que no haya empezado la escolaridad, tan solo un 15% aceptaría a un niño de 8 años y la gran diferencia está en el 0,8% que elegiría a uno que tenga 12 años.
Gabriel Cuello