El apellido Vila es, sin dudas, sinónimo de hockey, así como los Di Palma hacen referencia al instante al mundo del automovilismo o los Alcántara en el fútbol, los Vila se hacen presentes en el mundo del hockey sobre césped en un árbol familiar que involucra abuelo, padres e hijos.
Juan Cruz Vila hará referencia hacia esto último. Nacido en Olivos en 1987, es hijo de Luis quien comparte junto a Mario (sus hijos Matías, Rodrigo y Lucas se destacaron participando en “Los Leones”, siendo éste último quien pudo obtener la medalla de oro en Río 2016) Juan José y Alejandro el mismo padre llamado José –abuelo para el caso de Juan Cruz- . Todos ellos ex jugadores que trazaron cierta parte o el comienzo de su camino dentro de este deporte en el Club Banco Provincia, el mismo que fue forjado por el “precursor del hockey dentro de la familia”, José Vila, junto a un grupo de bancarios en el año 1949. Aunque también es cosa de mujeres, ya que según Juan Cruz “al mismo tiempo mi mamá también jugaba al hockey en Obras. Diría que es a través de ese deporte que se conocieron mis padres al igual que mis tíos con sus respectivas esposas, y crecimos todos jugando al hockey”.
La actualidad lo tiene en Bélgica, más precisamente en Gante donde se entrena para el Gantoise de dicha ciudad, ya recibido de arquitecto tras sus estudios en la Universidad de Buenos Aires y tras debutar en GEBA y realizar breves pasos por Banco Provincia –donde también se dio el lujo de dirigir divisiones menores desde su adolescencia para poder percibir sus primeros salarios para poder también pagarse y evocarse hacia sus estudios- o equipos del extranjero como Rissen THK y Klipper HTC de la segunda división alemana, país donde tuvo que combinar tanto sus aspectos deportivos como los laborales ampliando su vocación en varios estudios de arquitectura y asimismo, alcanzó a jugar en UDT de Canarias y Barcelona FC de España. El defensor se tomó unos minutos de descanso del entrenamiento y otorgó su tiempo para poder charlar con Pirámide Invertida.
-¿Te acordás de tu primer partido en Banco Provincia?
-Mi primer partido en el Torneo Metropolitano en Primera fue en 2004, tenía 17 años. Me acuerdo mucho. Siempre estaba en el banco de suplentes con muchas ganas de entrar pero sabía que por lo general no se rotaba mucho a los defensores más habiendo tantos por delante y con mucha experiencia y calidad. Pero bueno, ese día me tocó y no de defensor. Expulsaron a mi primo, Matías, y me metieron en la cancha así directo sin entrar en calor, fue en GEBA. Jugué de cinco. Fue un partido durísimo, que por suerte ganamos. Y la verdad que creo que fue un lindo debut.
-¿Sumaste experiencia en el exterior, cómo fue ese proceso?
-Ahora este año empecé en el club y pasando mitad de año me vine a Bélgica, al Gantoise en la ciudad de Gante y es la primera propuesta profesional de temporada entera que estoy haciendo ahora. En líneas generales, me gustaría que, a diferencia de lo visto en Europa, la Argentina pueda tener mejor infraestructura, que todos los clubes puedan tener cancha de agua y ahí sería muy bueno para el deporte. En Argentina hay mucho talento, también mucha dedicación y amor por el deporte. Además, es buena la manera que se entrena con el club o personalmente. Creo que el único «atraso» (si es que hubiera que ponerle una palabra) sería que la mayoría se entrena y juega en canchas de arena a diferencia con lo que me tocó ver en otros países.
-¿Qué podés comentar acerca del rendimiento de Banco en el Top 10? ¿Lo ves aspirando a los primeros puestos?
-Siempre aspiramos a lo más alto, sé que no se dieron muchos resultados pero quedan dos fechas y hay posibilidades, y ojalá se le den los resultados a los chicos para poder clasificar al playoff.
-¿Cuál es tu sueño dentro del mundo del hockey? ¿O ya lo cumpliste?
-De chico soñaba jugar algún torneo con Argentina, un Mundial o Juego Olímpico siendo las citas más sobresalientes. Sueño con poder jugar lo más que pueda siempre que el cuerpo y el deporte me lo permita, poder disfrutarlo y ojalá el día de mañana intentar ser tan bueno como mis padres para que el día que tenga hijos ellos puedan vivir este deporte y en el club en el que crecimos todos.
-¿Cómo fue tu experiencia dentro de Los Leones? ¿Te gustó un poco más que formar parte de la Selección de Buenos Aires?
-Fue una muy linda experiencia, la disfruté muchísimo, si bien no tuve éxito de jugar algún torneo grande, lo viví de la mejor manera posible. Era único, levantarse todos los días de buen humor a la mañana, desayunar bien para ir a entrenar y hacer lo que te gusta y encima siendo la selección argentina. Es distinto al equipo de Buenos Aires, en magnitud deportiva claramente. Pero aún así jugar para Buenos Aires es también de las cosas más lindas que me dio el deporte, tener amigos en otros clubes, compartir viajes y torneos desde juveniles a mayores, es extraordinario.
-¿Qué opinión te merecen Los Leones?
-Así como lo dice el ranking hoy, son los mejores del mundo para mí. Se entrenaron para eso y lo lograron; estoy muy orgulloso y contento por ellos por el momento que están pasando. Y este crecimiento como Selección le hace muy bien para que siga creciendo el deporte.
Ignacio Bocchio, 2ºB Turno Mañana