El Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires detectó e identificó siete casos de rabia en murciélagos en los distritos bonaerenses de Luján, La Plata, Vicente López, Ameghino y Pergamino, por lo cual los especialistas en zoonosis de la cartera distribuyeron vacunas antirrábicas para aplicar a los animales domésticos susceptibles de contraer el virus.
Las muestras habían dado resultado positivo en el Laboratorio de Zoonosis Urbanas de Avellaneda, por lo que de inmediato «se informó a las comunas que inicien las acciones de control de foco en un radio de 400 metros a la redonda desde donde se encontró el murciélago infectado con rabia». Varios funcionarios de Salud informaron que «hasta el momento no se ha registrado ningún caso de perros o gatos que hayan sido contagiados por estos murciélagos», y dijeron que «desde el año 1981 no se registra en la provincia ningún caso de rabia humana».
El director de Epidemiología, Iván Insúa, explicó que «por año se registran entre 10 y 15 casos de rabia en murciélagos por mordeduras a mascotas», pero aseguró que «si los perros y gatos son vacunados una vez al año desde los 3 meses de edad, no hay riesgo de transmisión de la rabia a las personas».
Esta enfermedad puede afectar a los animales domésticos porque los murciélagos infectados se arrastran y eso permite que perros y gatos intenten cazarlos. «Ante este tipo de situación el murciélago se defiende y muerde, trasmitiendo el letal virus de la rabia, que a su vez puede extenderse a las personas», agregó el profesional.
Tiago Ciale y Joaquín Vázquez