Los desastres naturales en Argentina parecen no tener fin. Anteriormente les tocó a Chubut y Tucumán; ahora es el norte del país el que se vio afectado con fuertes temporales de lluvia, viento y nieve que provocaron tres muertes y que varias zonas de las distintas provincias estén aisladas.
Víctimas, destrozos, caminos bloqueados, accidentes, corte de luz y clases suspendidas. Estas fueron las consecuencias del fuerte temporal de nieve que castigó sin piedad a varias provincias del país, sobre todo a las que más cerca están de la Cordillera de los Andes. Se sufrió particularmente en Jujuy, donde al menos tres personas murieron. Uno de los fallecidos es un hombre de 63 años que vivía en el asentamiento San Jorge de la capital jujeña, a quien se le cayeron encima bloques y chapas. Además, la mayoría de los cruces fronterizos con Chile debieron ser cerrados por las condiciones climáticas, mientras que en Córdoba se registraron intensas nevadas en Los Hornillos, Las Rabonas, Nono y Mina Clavero, localidades de Traslasierra, en el oeste provincial, con temperaturas bajo cero. Varias rutas debieron ser cerradas y, a causa del hielo, varios conductores perdieron el control de su automóvil.
A raíz del temporal de viento Zonda, una masa de aire cálido y seco que se originó en la Cordillera de los Andes provocó el corte del servicio de energía eléctrica en barrios de la capital jujeña y poblaciones cercanas.
Voceros del gobierno provincial indicaron que “se está evaluando la situación en el resto de la provincia”, y personal de la Coordinación Provincial de Emergencias informó que cuadrillas de la Policía y bomberos “están abocados a las tareas de limpieza y prevención debido a la caída de cables eléctricos y árboles que aún están en riesgo de caer”.
Aún se mantiene el alerta meteorológico en distintas regiones del norte del país en donde piden que las personas no salgan de sus casas por ninguna circunstancia y se mantengan a resguardo.
Lucio Castelli