Últimamente, Sacachispas ha tomado cierta trascendencia en el fútbol argentino. Puntero indiscutido en la Primera C, viene de eliminar a Arsenal en Copa Argentina y la singular manera de salir al campo de juego ante cada partido han hecho posar los focos, cuando esto no es habitual, sobre ellos.
En el equipo de Villa Soldati sobresale la historia de Alejandro Ayala, goleador histórico de la institución. Con el “lila” ha anotado más de 180 goles en sus cinco etapas por el club. Hoy, a sus 42 años, no tiene la continuidad ni la frescura de sus mejores épocas en el ascenso. Pero la pasión y alegría por jugar al fútbol siguen intactas, y con su experiencia, producto sus casi 25 años transitando las canchas del ascenso, es una pieza muy importante para el plantel.
Aunque no todo fue regocijo en su carrera. Norberto D’Angelo no lo tenía en cuenta para esta temporada. Estuvo ocho meses fuera de las convocatorias, pero nunca bajó los brazos. Y el 30 de abril volvió a ser partícipe del primer equipo y firmó otra página más en su historia con Sacachispas. Ayala marcó un gol agónico en la victoria 3-2 ante San Martín de Burzaco que le permitió a su equipo seguir a 10 puntos de su perseguidor en el torneo. Luego del partido expresó que tuvo una reunión con sus compañeros y que eso fue vital para que siga, ya que había meditado la decisión de dejar el fútbol.
En el partido del último martes frente Arsenal por los 32avos de final de la Copa Argentina ingresó con la número 18 en el segundo tiempo y fue el encargado de convertir el segundo penal de la serie. Otro episodio histórico para su carrera.
Se sabe, la vida de un jugador del ascenso no es para nada fácil, y mucho menos en los tiempos que vive el país. En el contexto de desorganización e incertidumbre que vivió y vive el fútbol argentino, los que más sufren son los de abajo. Y Ayala hace nueve años que reparte su tiempo entre las canchas y su otro trabajo, el que él reconoce con su verdadero empleo, ser recolector de basura.
La carrera del “conejo” parece estar llegando a su fin. Son pocos los futbolistas que han logrado competir con más de 40 años en un fútbol tan exigente como el argentino. Aun así, todavía le queda un sueño por cumplir: jugar en la Primera B Metropolitana. El ocaso de su carrera podría coincidir con el momento más importante en la historia de Sacachispas, ya que los de Soldati nunca han jugado en la tercer categoría.
Y está cerca de cumplirlo. El “lila” se encuentra primero indiscutido en la C, con 70 puntos tras 32 partidos disputados y a 12 de su inmediato perseguidor, Defensores Unidos. Con el ascenso a la B Metro cerca de concretarse, Ayala sabe que puede estar viviendo los últimos pasos de una extensa carrera digna de admirar. “Con el presidente del club ya está hablado y, si llega el momento, tendré que charlarlo con el DT. Me gustaría darme el gusto de jugar algún partido en la B, o aunque sea de ir al banco o firmar una planilla. Entonces sí, el día siguiente ya le prometí a mi mujer que dejo el fútbol”, manifestó en diálogo con La Nación.
Alejandro Ayala lo tiene claro. El goleador sigue recolectando y persiguiendo su ilusión con el “lila”. Y está cerca de concretarse.
FERNÁNDEZ FRANCISCO 2° A – TURNO MAÑANA.