La historia de “Petróleo” se conoció a través de las redes sociales. Dos jóvenes que transitaban por las calles de Monte Chingolo –en la localidad de Lanús- se impactaron al ver un perro arrastrándose en una zanja, cubierto de brea. Solicitaron ayuda y fueron auxiliados por un patrullero de la zona que los trasladó junto al animal a la clínica veterinaria municipal. Lo revisaron los veterinarios y finalmente fue derivado al “Voluntario Zoonosis de Lanús”, donde comenzó el gran trabajo de limpieza para «Petróleo».
Según cuenta Myriam Ortellado, coordinadora del voluntariado, el proceso de higienización se realizó durante 5 horas sin parar. “En principio no salía con nada, luego empezó a aflojar un poco con aceite, usamos 5 litros. Con los dedos y espátulas se nos facilitó”, comentó en su cuenta de Facebook.
En primera instancia todos los productos que utilizaron no hacían efecto, solo habían logrado quitar un 30% de brea y esto los desaminaba. «De repente notamos un cambio y empezó a caer bastante más, ahí nos dimos cuenta de que era más paciencia que productos. En la segunda etapa usamos detergente y ahí fue efectivo mezclado con aceite”, describió Myriam. Luego de largas horas limpiando todo su cuerpo, los jóvenes voluntarios consiguieron avanzar un 80% con la desinfección de Petróleo.
La integrante del voluntariado aseguró: “No sabemos cómo se hizo eso y nadie lo sabe, pero pensamos que lo tiraron porque estuvo muy sumergido, no le faltó un pedacito del cuerpo”. Se sospecha que el perro puedo haber sido otra víctima de la crueldad del hombre.
«Petróleo» recibió la medicación indicada por los veterinarios, alimento y mucha agua, aunque todavía sigue el peligro de intoxicación, ya que el animal ingirió una gran cantidad de brea liquida.
El conmovedor rescate aún no ha finalizado: desde el Voluntario Zoonosis comenzaron la búsqueda para darle una familia a «Petróleo», que sea capaz de brindarle todo el cariño que necesita y poder darle un final feliz a esta historia.
Camila Suárez