Aunque hubo algunos días de mucho frío y lluvias con máximas de 10 grados durante el mes pasado, lo que predomina en estas útlimas semanas del otoño son temperaturas de primavera o verano que llegaron a alcanzar hasta los 25 grados, algo nada normal para la época, que contrasta con lo que ocurrió, por ejemplo, el año pasado, con el otoño más frío desde mediados del siglo pasado.
Sobre estos climas y precipitaciones ocurridos a nivel global, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOOA por sus siglas en inglés) informó que en marzo último la temperatura media mundial se ubicó 1,5 grados por encima del promedio de 12,7 del siglo pasado, que además le significó convertirse en el segundo marzo más caluroso desde que comenzaron los registros mundiales de temperatura en 1880, hechos que demuestran el fuerte avance del calentamiento global.
Además, otro hecho destacado por este fenómeno son las lluvias y precipitaciones elevadas de forma no habitual en algunas provincias argentinas que hasta causaron grandes inundaciones, y en otros lugares del mundo donde se supone más cantidad de lluvia como en gran parte del Hemisferio Norte fueron mucho menores que lo normal.
Por último, hay que decir que debido a las lluvias en los próximos días, las temperaturas bajarán pero no de forma significativa, por lo que el clima invernal todavía no va a aparecer pero, según algunos centros de meteorología, una vez que lleguen las bajas temperaturas serán aún más bajas que las del año pasado, por lo que puede esperarse un invierno verdaderamente frío.
Martín Fernández