A Platense se lo veía mal, estaba cerca del fondo de la tabla y su juego era irregular. Por este motivo, decidió cambiar de entrenador. Llegó Omar Labruna bajo el mandato de la anterior directiva, pero los buenos resultados hicieron que el nuevo presidente, Fernando Wendt, le renueve su contrato.
Omar le dio aire al club de Vicente López y lo acostumbró a irse con puntos. Buen fútbol y goles fueron la principal fuente de alimentación del Calamar; de esta forma, alcanzó los 14 partidos sin conocer la derrota, cosechando 9 triunfos y 5 empates, un total de 32 puntos de la mano de su nuevo DT. De a poco iba llegando a la superficie y la gente se ilusionaba con un posible ascenso.
Todo era color “marrón” hasta que una ola los bajó de un hondazo. Esa ola se llamó Deportivo Riestra, quien no le temió al buen momento de Tense y lo pasó por arriba. Por la vigésima sexta fecha de la Primera “B” Metropolitana, lo venció 4 a 0 con goles de Mauro Ortiz, en dos oportunidades, Nahuel Benítez y Roberto Bochi. Esta derrota fue un golpe duro ya que fue superado en todo sentido por Riestra y lo deja lejos del ascenso.
La próxima fecha se enfrentará a Tristán Suárez y tratará de hacer pasar el mal trago que dejó la caída en el Bajo Flores. Los resultados y los hinchas acompañan a Omar Labruna en el desafío de volver a conseguir un triunfo y enderezar su camino hacia la Primera “B” Nacional.