La relación entre el primer mandatario y el jefe de la Iglesia Católica nunca fue óptima ya que desde la época que Macri era Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se produjeron cortocircuitos
Encuentro frío en la visita de Macri al Vaticano el 27 de febrero
El origen de los desencuentros se remonta a la poca atención que le dio Macri como Jefe de Gobierno a las denunciadas efectuadas por el titular de la Fundación La Alameda, Gustavo Vera (amigo muy cercano de Jorge Bergolglio), sobre los talleres clandestinos (incluida una a la empresa Cheeky, propiedad de la familia de Juliana Awada) y la trata de personas en la Ciudad de Buenos Aires. Luego, en 2009, al entonces cardenal del Arzobispado de Buenos Aires no le agradó para nada la decisión del actual presidente de no apelar el fallo de una jueza a favor del casamiento de una pareja de mismo sexo en la ciudad, lo que generó otro encontronazo entre ambos.
Uno de los objetivos de este nuevo gobierno era mejorar la relación de Macri con el Papa Francisco pero ya de entrada no empezaban de la mejor manera: el máximo referente de la Iglesia Católica no llamó al actual mandatario para felicitarlo por su triunfo en el balotaje del 22 de noviembre. La Santa Sede negó que haya una mala predisposión del Papa y alegó que, por protocolo, el Papa «no puede pronunciarse en ningún caso cuando se celebran elecciones en los países, y no está dentro del protocolo enviar mensajes, ni llamados ni telegramas».
Otra de las cosas que pusieron en cuestión la relación entre ambos Jefes de Estado, fue la negativa del Papa a recibir a Macri en una posible escala en Roma antes de que el ex Jefe de Gobierno asistiera al Foro Económico Mundial en Davos, Suiza a finales de enero.
Tiempo después, el 27 de febrero, luego de idas y venidas, Macri pudo concretar una visita al Vaticano para reunirse con Bergoglio pero el encuentro duró 25 minutos (en comparación con las dos horas, aproximandamente, que tenía el Papa con la ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner) y se vieron expresiones frías de Francisco para con el presidente.
Y como frutilla del postre, Su Santidad rechazó recientemente una donación de $16.666.000 por parte del Gobierno Nacional a través de un decreto del 30 de mayo para la fundación Scholas Ocurrentes, creada por Francisco en 2013 para promover el vínculo entre las escuelas de todo el mundo. Los directores de la fundación, Enrique Palmeyro y José María del Corral, le escribieron una carta, fechada el 9 de junio, al Jefe de Gabinete, Marcos Peña, en la que decía:«Teniendo en cuenta que hay quienes pretenden desvirtuar este gesto institucional (…) con el fin de generar confusión y división entre los argentinos (…), convenimos en suspender el aporte económico no reintegrable de $ 16.666.000 pesos, destinado a sufragar los gastos de personal, infraestructura y equipamiento de la sede central de nuestro país». Aunque también agradecieron la consideración por la donación, el rechazo generó malestar en la Casa Rosada.
Mauro Coppolillo Portela, Gabriel Rivero, Nicole Vigon, Julieta Ravecca, Mariano Alvarez 2°año «B» turno mañana